Primeras impresiones. Va a ser un campeonato intenso, con buenos partidos y goles. En los primeros doce partidos ninguno ha acabado con empate a cero. También se ha levantado el acta de defunción del tiki-taka en favor de un juego más físico combinado con la velocidad. La mayoría de los encuentros se han ganado por la mínima, salvo los de Alemania y España. En el caso de Alemania fomentado por un sparring, los escoceses, muy flojo, sin pegada y blandito en defensa. Lo de España se comentará a su debido tiempo.
Muy poco positivo que decir de Francia, Inglaterra, Países Bajos, Portugal o Italia, los favoritos. Salvo que hayan escondido algo en su primer duelo, hay más sombras que luces en su juego y sacaron adelante sus partidos con bastantes dificultades y por la mínima. De entre los que no son favoritos yo destacaría a Serbia y a Turquía, con un Guler que apunta a futura estrella, y la sorpresa de Eslovaquia frente a la decadente Bélgica, que se ha permitido el lujo de no convocar al mejor portero del mundo.
Con España no se pueden echar las campanas al vuelo por un partido. Recuérdese el comienzo del Mundial de Qatar con la goleada a Costa Rica y lo que luego vino. Croacia es una excelente selección y meterle tres a cero tiene su mérito, aunque ellos, de estar más acertados, nos podían haber metido cuatro. Hay que corregir muchos errores, pero es buena noticia que se haya desterrado el sobeteo de balón y sustituido por la velocidad. Ahora, a esperar a Italia.